a quien engaño? aun lo hago.
soy de las personas que se distraen con mucha facilidad si supieran cuanto me tarda escribir un poema
pero aun después de la luna, las nubes capturan mi atención de una manera asombrosa...
viendo las nubes pude perderme
imaginando lo que todo niño suele creer
como lo explico para que puedan entenderme
dormir sobre una nube y que me puedan ver
alejado de todos los ruidos de la gran ciudad
volar como peter pan hacia el país de nunca jamas
saltar sobre los cúmulos como el colchón mas soñado
patinar entre los estratos como en un juego extremo
soñando con las nubes descanse entre esos cirros que parecen ángeles
me sentí un egoísta bajo el frió de un nimbos precipitando
le huí por miedo a un dragón que se veía esponjoso
y me reí por mi inmadurez por soñar con estas cosas
en ese momento me detuve sobre la nube mas alta
observe la luna tan cerca que me creí en el espacio
mire hacia abajo y vi la deslumbrante caracas
mire sus luces como el pesebre que todos imaginan
hice mis vista ciega como lo hacen las autoridades ante los criminales que trae la noche
pero me encanto ver como la gente festejaba con locura y derroche
hasta que te vi....
sentado en una nube te vi
te vi tan hermosa que parecías levitar tras cada paso
la nube sobre la que estaba sentado sentía envidia de la suavidad de tus labios
la luna empezaba a odiar tu belleza
las luces de caracas las opacaba tu sonrisa
simplemente era inevitable no verte, los hombres nombraban tu cuerpo
el cual no evite detallar
la brisa acariciaba tu cabello que hasta las estrellas tenían que envidiar
los ojos que eran hermosos no olvidare jamas
lastima que desperté de mi sueño y ni nubes ni tu rostro pude ver mas
Wilhem Marin
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